Milenio DiarioMiércoles 13 de febrero del 2008
El herbívoro Velafrons coahuilensis vivió hace 72 millones de años
Se trata del reptil más completo que se ha recuperado en México. El lugar podría ser una de las vetas fósiles más ricas del continente americano.
La paleontóloga mexicana Martha Carolina Aguillón fue quien encontró los restos fósiles. Foto: Douglas C. Pizac/AP
Un dinosaurio con la cresta en forma de vela vivió en las costas de México hace 72 millones de años, comiendo plantas y tratando de evitar a un primo del temido Tiranosaurio Rex.Científicos de México y Canadá anunciaron el martes el descubrimiento del Velafrons coahuilensis, un dinosaurio con pico de pato que vivió cerca de siete millones de años antes de que un gran meteorito se impactara en la Tierra y acabara con los dinosaurios y otras criaturas.“Los Velafrons fueron probablemente vagabundos playeros”, dijo Terry Gates, paleontólogo del Museo de Historia Natural de Utah y de la universidad del lugar.Su hogar en la costa era frondoso, con los ríos fluyendo hacia el mar poco profundo y de aguas cálidas, dijo.“Debió haber sido un tiempo precioso para estar ahí, muy cálido, muy al estilo del Mediterráneo”, dijo por su parte Scott Sampson, otro paleontólogo del Museo de Historia Natural de Utah. “Pero tenías que preocuparte con la presencia del Tiranosaurio por ahí”, agregó.Gates comentó que se trata del dinosaurio más completo jamás encontrado en México.Dijo que en expediciones recientes los científicos también encontraron más dinosaurios con pico de pato y de otras especies.Los restos fosilizados del Velafrons fueron hallados en un escarpado y seco terreno en el norte de México, en la localidad de Rincón Colorado, 43 kilómetros al poniente de Saltillo.Sampson dijo que el descubrimiento ayuda a abrir una ventana a cómo era la vida a finales del periodo Cretáceo en la parte sur del oeste de Norteamérica. En ese periodo, el continente estaba dividido en dos por un largo y estrecho mar interior que se extendía desde el Océano Ártico hasta el Golfo de México. La cabeza de la criatura es su aspecto más relevante. En la punta del esqueleto destaca la cresta con una forma que hace recordar a la vela de un bote. De hecho Velafrons coahuilensis significa “Frente con forma de vela de Coahuila”.Los Velafrons y otros dinosaurios con pico de pato tenían huesos nasales en la punta de la cabeza, y las fosas se extendían a lo largo de grandes crestas. “La prolongación de las fosas nasales les permitían hacer toda clase de cosas locas”, dijo Gates. “Es totalmente raro y extraño”, agregó.Los científicos aún no tienen clara la función de la cresta, pero creen que pudo ayudarles a atraer a sus parejas. También, el paso del aire por la cresta pudo haber creado un sonido distintivo, pero similar al de una trompeta.Un Velafrons adolescente medía entre 7.6 y 9.0 metros de altura y un adulto pudo haber llegado a los 10.7 metros, según publicaron los investigadores en el Journal of Vertebrate Paleontology.Los dinosaurios con pico de pato eran comunes en ese periodo.Sampson dijo que los Velafrons se asemejan mucho a otros dinosaurios con pico de pato conocidos como Corythosaurus, y que vivieron cerca de tres millones de años antes en la provincia canadiense de Alberta.Este tipo es famoso por su cresta, semejante al casco que usaban los ancestrales guerreros griegos.El esqueleto del Velafrons fue encontrado en 1995 por la paleontóloga mexicana Martha Carolina Aguillón Martínez, quien estaba recogiendo basura que había dejado un grupo de escolares en la zona del hallazgo.Durante varias temporadas grupos de investigadores trabajaron en el yacimiento, pero fue hasta 2002 cuando una expedición armada de un martillo perforador logró abrirse paso entre las piedras hasta encontrar el magnífico cráneo.Los Velafrons convivieron con pequeños mamíferos, lagartos, tortugas y otros dinosaurios.Sampson dijo que los restos de un dinosaurio cornudo de la familia de los Tricerátopos también fueron hallados, junto con evidencias de que un gran carnívoro vinculado con el Tiranosaurio también andaba por ahí.Muchos de los huesos de los dinosaurios están cubiertos con fósiles de caracoles y almejas, lo que indica que estos animales vivieron cerca de la costa.Gates dijo que antes de ahora, el registro de dinosaurios hallados en México había sido “escaso”. Hoy la situación es muy distinta. “Estoy sorprendido de lo prolífica que es esta región”, añadió el paleontólogo. “Gracias al gran número de fósiles, la calidad de la preservación, y del increíble equipo de investigación que trabaja el área, más espectaculares descubrimientos están a la vuelta de la esquina”.Los investigadores esperan que el proyecto en Coahuila fomente más turismo al área y atraiga atención al Museo del Desierto, donde se albergará al espécimen de forma permanente.
La paleontóloga mexicana Martha Carolina Aguillón fue quien encontró los restos fósiles. Foto: Douglas C. Pizac/AP
Un dinosaurio con la cresta en forma de vela vivió en las costas de México hace 72 millones de años, comiendo plantas y tratando de evitar a un primo del temido Tiranosaurio Rex.Científicos de México y Canadá anunciaron el martes el descubrimiento del Velafrons coahuilensis, un dinosaurio con pico de pato que vivió cerca de siete millones de años antes de que un gran meteorito se impactara en la Tierra y acabara con los dinosaurios y otras criaturas.“Los Velafrons fueron probablemente vagabundos playeros”, dijo Terry Gates, paleontólogo del Museo de Historia Natural de Utah y de la universidad del lugar.Su hogar en la costa era frondoso, con los ríos fluyendo hacia el mar poco profundo y de aguas cálidas, dijo.“Debió haber sido un tiempo precioso para estar ahí, muy cálido, muy al estilo del Mediterráneo”, dijo por su parte Scott Sampson, otro paleontólogo del Museo de Historia Natural de Utah. “Pero tenías que preocuparte con la presencia del Tiranosaurio por ahí”, agregó.Gates comentó que se trata del dinosaurio más completo jamás encontrado en México.Dijo que en expediciones recientes los científicos también encontraron más dinosaurios con pico de pato y de otras especies.Los restos fosilizados del Velafrons fueron hallados en un escarpado y seco terreno en el norte de México, en la localidad de Rincón Colorado, 43 kilómetros al poniente de Saltillo.Sampson dijo que el descubrimiento ayuda a abrir una ventana a cómo era la vida a finales del periodo Cretáceo en la parte sur del oeste de Norteamérica. En ese periodo, el continente estaba dividido en dos por un largo y estrecho mar interior que se extendía desde el Océano Ártico hasta el Golfo de México. La cabeza de la criatura es su aspecto más relevante. En la punta del esqueleto destaca la cresta con una forma que hace recordar a la vela de un bote. De hecho Velafrons coahuilensis significa “Frente con forma de vela de Coahuila”.Los Velafrons y otros dinosaurios con pico de pato tenían huesos nasales en la punta de la cabeza, y las fosas se extendían a lo largo de grandes crestas. “La prolongación de las fosas nasales les permitían hacer toda clase de cosas locas”, dijo Gates. “Es totalmente raro y extraño”, agregó.Los científicos aún no tienen clara la función de la cresta, pero creen que pudo ayudarles a atraer a sus parejas. También, el paso del aire por la cresta pudo haber creado un sonido distintivo, pero similar al de una trompeta.Un Velafrons adolescente medía entre 7.6 y 9.0 metros de altura y un adulto pudo haber llegado a los 10.7 metros, según publicaron los investigadores en el Journal of Vertebrate Paleontology.Los dinosaurios con pico de pato eran comunes en ese periodo.Sampson dijo que los Velafrons se asemejan mucho a otros dinosaurios con pico de pato conocidos como Corythosaurus, y que vivieron cerca de tres millones de años antes en la provincia canadiense de Alberta.Este tipo es famoso por su cresta, semejante al casco que usaban los ancestrales guerreros griegos.El esqueleto del Velafrons fue encontrado en 1995 por la paleontóloga mexicana Martha Carolina Aguillón Martínez, quien estaba recogiendo basura que había dejado un grupo de escolares en la zona del hallazgo.Durante varias temporadas grupos de investigadores trabajaron en el yacimiento, pero fue hasta 2002 cuando una expedición armada de un martillo perforador logró abrirse paso entre las piedras hasta encontrar el magnífico cráneo.Los Velafrons convivieron con pequeños mamíferos, lagartos, tortugas y otros dinosaurios.Sampson dijo que los restos de un dinosaurio cornudo de la familia de los Tricerátopos también fueron hallados, junto con evidencias de que un gran carnívoro vinculado con el Tiranosaurio también andaba por ahí.Muchos de los huesos de los dinosaurios están cubiertos con fósiles de caracoles y almejas, lo que indica que estos animales vivieron cerca de la costa.Gates dijo que antes de ahora, el registro de dinosaurios hallados en México había sido “escaso”. Hoy la situación es muy distinta. “Estoy sorprendido de lo prolífica que es esta región”, añadió el paleontólogo. “Gracias al gran número de fósiles, la calidad de la preservación, y del increíble equipo de investigación que trabaja el área, más espectaculares descubrimientos están a la vuelta de la esquina”.Los investigadores esperan que el proyecto en Coahuila fomente más turismo al área y atraiga atención al Museo del Desierto, donde se albergará al espécimen de forma permanente.
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